Mi método

Existen tendencias vocales (formas aprendidas de uso vocal), pero dentro de cada tendencia cada voz es única. El método consiste en determinar tu particularidad y de ahí proponerte los ejercicios que vayan mejor para tu tipo de voz. Es importante considerar que un ejercicio inadecuado puede generar un aprendizaje opuesto al deseado.

Al igual que cada voz, las sensaciones e imágenes mentales son propias de cada persona. Tradicionalmente se solía enseñar el canto a partir de las imágenes mentales que tenía el profesor y que eran además, las oficialmente aceptadas ("tienes que sentir cómo te atraviesa un halo de luz por la cabeza", "tienes que poner la voz en la máscara", etc). Hoy sabemos que estas imágenes pueden causar mucha confusión desde un enfoque pedagógico de la voz, ya que las imágenes mentales del profesor y del alumno/a, pueden ser totalmente diferentes.
Un aprendizaje sensoriomotor implica poner el enfoque en el alumno/a .
La idea, es que aprendas a partir de TUS PROPIAS SENSACIONES físicas. No usamos imágenes mentales. Esto se puede lograr a través de la imitación, haciendo que el cantante ejecute y experimente y luego reconozca desde su cuerpo qué ha logrado. El resultado es un aprendizaje permanente. Ya que de hacer, el cuerpo adopta de forma natural los patrones adquiridos.

Imagínate que para aprender a montar en bici, en lugar de simplemente montarnos en ella con unas pautas y practicar, nos dedicásemos a analizar de manera abstracta qué hace cada parte de la misma (pedales, manillar, sillín...): tardaríamos infinitamente más tiempo en aprender, ya que nuestra mente estaría analizando en vez de experimentando. Un buen profesional de la voz tiene que saber cómo funciona la misma para entender qué está ocurriendo en la voz de su alumno/a, pero el alumno/a, tiene que experimentar con su voz sin poner demasiada cabeza. Una vez que el cuerpo aprende, entonces ya sí podremos analizar qué patrones han cambiado y por qué.